Fátima Bosh representante de México en el Miss Universo es coronada por armar una pataleta en el certamen

 

La representante de México, Fátima Bosh, es coronada en un certamen de Miss Universo que muchos creen fue un fraude. Foto: AP 

Por Germán Carías/GCIDA2025®

Fátima Bosch fue coronada Miss Universo 2025 ante la mirada incrédula del mundo, que observó el certamen por televisión, celulares, computadoras y en el Impact Arena de Bangkok  de Tailandia. La representante de México nunca estuvo entre las favoritas, no era la más bonita ni la más preparada, pero una pataleta que armó la azteca por un encontronazo con el jefe del comité organizador del evento en suelo tailandés, Namat Itsaragrinsil, le valió salir victoriosa.

La mexicana denunció que el alto ejecutivo la había llamado tonta, lo que aprovechó la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, para dar el espaldarazo a la concursante con su fastidioso argumento de la discriminación. No importa que su gobierno esté manchado al ser colaboradora del “Cártel de Los Soles”, Sheinbaum, sabe que la tribuna del Miss Universo, la ayuda ha ganarse a la población de su país con la bravuconada.

Vamos a estar claros. México no es un país líder ni en el continente americano mucho menos en el mundo, pero la cantidad de habitantes que ostenta el territorio mexicano, la mayor cantidad de hispanohablantes del mundo, pues lo hace un mercado atractivo para la Organización de Miss Universo. Tampoco podían los organizadores del certamen permitirse la publicidad negativa por la pelea que se viralizó en Redes Sociales.

El fraude fue claro y notorio. Fátima Bosch no debía estar ni siquiera entra las últimas 5 finalistas. La representante de Chile, Inna Moll, no solo es más bonita que la azteca, es más preparada. Al ver que se había colado la mexicana, muchos ya olíamos la trampa. Sin embargo pensábamos que la sindéresis iba a prevalecer, algo bien alejado de la realidad. La Organización Miss Universo prefirió cortar por lo sano. Así no perderían anunciantes de México, derechos de televisión, entre otras cosas.

Lo triste, que trato de analizar en mi artículo, es lo que puede suceder en futuras competiciones de belleza. Ahora las concursantes saben que tienen el poder con las Redes Sociales. Es decir, armó una pataleta, berrinche, rabieta, corajina y pongo en jaque a toda una organización. Esto causó renuncia de jueces y que las concursantes  no felicitaran en su mayoría, solamente 4, a Fátima Bosch por su corona. Por Dios. 

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